miércoles, 25 de junio de 2014

Terrassa retrocede 100 años con la Fira Modernista

Ya conocíamos la Fira Modernista de Terrassa por diferentes artículos leídos en ediciones anteriores. Este año por fin nos hemos animado a acercarnos y disfrutar de ella en una jornada donde el buen tiempo ha acompañado y mucha gente ha aprovechado para pasear por las calles de una ciudad que ha retrocedido cien años y ha vuelto a principios del siglo XX.

Cuando llegamos nos sorprende la alegre música de la Jazz Cem Band.


Es el acompañamiento musical del desfile que está realizando el Circ Raluy desde el Raval de Montserrat a la Rambla d´Egara.


Cada uno de los carruajes es una obra de arte única. El extraordinario trabajo de restauración llevado a cabo por el equipo de Lluís y Carlos Raluy nos ofrece hoy la posibilidad de apreciar el talento y el esfuerzo de los pintores y carpinteros que construyeron estas piezas a caballo entre el siglo XIX y el XX. Y todas ellas en perfecto estado de conservación y uso.


Este circo está inspirado en el pasado y es un homenaje al circo clásico de la época de oro, además es el primer circo-museo del mundo.


En la Rambla d´Egara hay un mercadillo de alimentación, flores, perfumería y artesanía. Todos los puestos están atendidos por personas vestidas de época. Destaca el puesto de los quesos.


O la panadería


La artesanía también está presente.


En uno de los puestos podemos ver una motocicleta de la época. Este fin de semana también habrá un encuentro de motos y coches clásicos.


Al lado podemos ver una de esas bicicletas antiguas que tanto llaman la atención por la diferencia de diam


Un anticuario vende artículos de la época.


Damos una vuelta por el Mercat de la Independencia donde muchos tenderos y clientes también se han vestido de época.


El tiempo acompaña y muchos ciudadanos han escogido sus mejores telas para vestirse de época. Aprovechan cualquier rincón para hacerse unas fotos.


Uno de los atractivos de esta Fira Modernista son las jornadas de puertas abiertas que realizan museos y espacios públicos. Destaca la posibilidad de visitar le Seu d´Egara, uno de los conjuntos monumentales románicos más espectaculares de Europa, el Ayuntamiento, la Casa Alegre de Sagrera, el Castell Cartoixa de Vallparadis o el Museu de la Ciencia i de la Tecnica de Catalunya.
Optamos por acercarnos a este último ya que se encuentra en la misma Rambla d´Egara. A la entrada vemos salir más ciudadanos vestidos para la ocasión.


En su interior los protagonistas de uno de los actos más conocidos de la Fira, la boda modernista, posan realizándose fotografías.


El museo es bastante grande y disfrutamos mucho, sobretodo, en la zona de exposición de coches de época.


También es muy importante la colección de motos. Un paraíso para los aficionados a las 4 o las 2 ruedas.


Salimos del Museu de la Ciencia i la Tecnica para acercarnos hasta el Raval de Montserrat, uno de los principales puntos donde gira la fiesta. El ayuntamiento está engalanado para la ocasión.


Allí mismo están instaladas las casetas de la Fira de Ciudades Modernistas. Aprovechamos para recoger toda la información posible para nuestras próximas salidas.


Algunas de las calles que llevan a la Plaça Vella están decoradas para la ocasión. La verdad es que el calor ya aprieta y se agradecen las telas que protegen a los viandantes.


Algunos de los paseantes están muy metidos en su papel, como este chico con su bigote y perilla de época.


La Plaça Vella está a rebosar con todas las terrazas llenas de gente.


Ding-Dong ¡¡¡¡ En esta plaza vemos el carillón instalado para los conciertos que tienen lugar estos días.


En nuestro paseo nos encontramos personajes que parecen sacados de un libro de Stephen King.


Hay trajes realmente elaborados y muy fieles a la moda de hace 100 años.


Hasta la policía va vestida de época.


En nuestro paseo nos cruzamos con el alcalde de Terrassa.


Uno de los platos fuertes de la jornada es la recreación de una boda de la época.


Nos acercamos hasta el Parc de Sant Jordi donde hay montados muchos puestos de la Feria de artesanía y muestra de oficios antiguos. Los alrededores están llenísimos de gente y se hace difícil avanzar.


Frente a la Masía Freixa, grupos de niños están realizando simpáticas actuaciones.


Ya de vuelta al coche nos encontramos con un grupo de niñeras.


La Fira Modernista se ha convertido en un motor de promoción turística, cultural y un elemento de dinamización económica ya que atrae a miles de visitantes.
Además, desde el 2007 cuenta con el reconocimiento de la Generalitat como fiesta local de interés turístico.
Más de 130 entidades se vuelcan para tejer un frenético fin de semana modernista con casi 200 actividades. Os recomiendo que el próximo año a principios de Mayo, cuando ya el calor primaveral nos anima a salir de casa os acerquéis hasta Terrassa para disfrutar de su Fira Modernista.

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