Mura es un pintoresco pueblo de 230 habitantes que mantiene intacto su encanto medieval a la vez que está rodeado de un entorno natural privilegiado, lleno de pozas, fuentes, cuevas y balmas, que se pueden descubrir a través de los numerosos senderos y caminos que salen del pueblo.
Mura se encuentra a 72 kilómetros de Barcelona. Salimos de Barcelona en dirección a Sabadell por la C-58. Nuestro principal punto de referencia es Manresa, que queda algo más allá de nuestro destino, por lo que debemos coger la C-16. Salimos antes de Manresa en El Pont de Vilomara. La C-16 es parcialmente de peaje y los fines de semana y festivos cuesta 7,74€; de lunes a viernes no festivos cuesta 4,26€. En la rotonda cogemos la BV-1124 con dirección a Rocafort y Mura. Al llegar a Rocafort veréis que junto a la iglesia hay un pequeño cartel, algo artesanal, que nos indica el camino a Mura. Bajamos por algo que más parece un camino rural encementado que una carretera. La verdad es que si te cruzas con un camión debe ser complicado no rozarse. Gracias a Dios casi no hay tráfico.
Hay otra ruta alternativa, algo más corta, unos 55 kilómetros, que desde Matadepera cruza el Parc Natural de Sant Llorenç hasta Mura. Aunque en tiempo se tarda lo mismo pues hay muchas mas curvas. En otra salida iremos por aquí y ya os contaré si merece la pena este itinerario.
Nuestro objetivo es llegar al Gorg del Pare, que se encuentra en el torrent d´Estenalles. Un espacio privilegiado en el que cuando el agua es abundante se pueden admirar los saltos de agua que se forman.
A la entrada del pueblo aparcamos el coche en uno de los parkings habilitados.
Muy cerca del parking se encuentran las antiguas escuelas donde se ha instalado el centro de información del Parque Natural de Sant Llorenç del Munt i l´Obac. Allí podemos encontrar una exposición permanente sobre el territorio del parque y un audiovisual introductorio. También podemos encontrar información turística sobre rutas a pie, alojamientos, restaurantes, etc de los municipios de la zona. El centro está abierto de lunes a viernes, de 9 a 14h. y de 16h a 19h. Los sábados, domingos y festivos de 10 a 14h. En agosto está cerrado.
Desde allí tenemos una panorámica inicial del pueblo, nos parece bastante pintoresco con cierto encanto medieval.
En la parte de abajo vemos una riera. Estamos a mitad de junio y el calor aprieta, así que nos bajamos a refrescarnos algo antes de buscar algún sitio para comer.
Desde la riera tenemos una vista espectacular del pueblo.
Hemos salido de Barcelona muy tarde con lo que ya es hora de comer. Decidimos comer en el Hostal de Mura ya que tienen unas mesas en una terraza al aire libre y como vamos con el perro es una buena opción. Ofrecen un menu de 15 euros, algo carillo pero es lo que tienen estos pueblos pequeños y turísticos. Eso si, la comida bastante buena, al final opto por platos de la tierra, un fideua con un alioli muy suave, carne a la brasa y crema catalana casera.
Después de comer decidimos visitar con calma Mura.
El pueblo se encuentra en el lugar donde la riera de Nespres se ensancha un poco. El espacio es reducido y las casas se adaptan a las sinuosidades de la montaña.
Empinadas calles y casas de típica arquitectura montañosa es lo que ofrece este bonito pueblo.
Las piedras de las callejuelas de Mura parecen darnos tranquilidad y transmiten como se debía vivir en la Edad Media.
El estado de conservación es muy bueno y la homogeneidad de la mayoría de las casas nos indican el esfuerzo de sus habitantes por mantener ese espíritu medieval.
Muchas de las casas han sido restauradas para ser disfrutadas como viviendas de veraneo.
Sin lugar ese esfuerzo comunitario tiene como recompensa tener unos de los pueblos más bonitos de Cataluña.
Sin lugar a dudas el edificio más importante de Mura es su iglesia parroquial alrededor de la cual se formó el pueblo.
La Iglesia románica de Sant Martí de Mura es muy bella y es el resultado de diferentes trabajos que van desde el siglo XI al XVII, pues su construcción se da por finalizada en 1697. La iglesia está compuesta por una nave antigua del siglo XI, una del siglo XII que es la principal, y una tercera que le fue añadida en 1697. La nave principal tiene un valioso portal románico con arquivoltas sostenidas por columnas y capiteles historiados. En el tímpano hay una escena que representa la Adoración de los Reyes Magos.
El ábside muestra un bonito trabajo arquitectónico, tanto en el interior como en el exterior.
Nuestro objetivo es el gorg del Pare, un curioso salto de unos 10 metros de alto situado en la riera de Estenalles. Debajo del salto se ha originado un gorg que durante el verano atrae muchísimos visitantes deseosos de aliviar el calor con un refrescante baño. Se encuentra a unos 2 kilómetros del pueblo y se accede a través de un camino amplio, muy llano y bien señalizado. Junto a la Iglesia encontramos la riera que seguiremos hasta el Gorg.
Desde el camino tenemos una buena vista del casería que forma Mura.
Salimos de Mura por el carrer del Sol, que más adelante se llama Sant Antoni Maria Claret. Hemos dejado a nuestra derecha el parque donde se encuentra la font de l´Era. Un bonito espacio equipado con mesas donde comer algo.
Dejamos atrás las últimas casas del pueblo y ya sentimos el sonido del agua que baja por el torrente, que nos acompañará hasta el gorg.
Encontramos la ermita de Sant Antoni a la izquierda. No tiene demasiado interés, pero ofrece un bonito atrio que en caso de lluvia puede protegernos.
Hemos dejado atrás pistas a la izquierda que no seguiremos. El camino continúa llano junto a la riera. Unos metros más adelante dejamos a la izquierda el sendero que llega hasta la font del Xasquet.
Más adelante dejamos a la derecha un camino que cruza la riera y lleva hasta el lugar conocido como els Tolls.
Al cabo de unos minutos llegamos a la font del Rector, equipada con mesas y bancos.
Unos metros más adelante llegamos a la font de l´Escola.
El gorg ya se oye muy cerca, sólo hay que seguir adelante por el pequeño sendero que nos acerca al gorg.
La font del Bleda está junto al gorg al otro extremo de la riera.
Por fin llegamos al gorg del Pare. Un lugar idílico para pasar un buen día en cualquier época del año pero sobretodo si la temperatura permite un baño.
Aunque estamos a mitad de junio las cascadas llevan algo de agua. En épocas de lluvias debe ser espectacular.
Perfecto en otoño o primavera donde evitaremos encontrar el lugar muy concurrido. Mejor en días laborables que en festivos para evitar a los domingueros.
La vuelta la realizamos por el mismo camino por el que hemos venido.
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